A raíz del BLOG que hicimos la semana pasada sobre la importancia de la salud mental para los estudiantes, queremos centrarnos en el de hoy en hablar del estrés. Lleváis ya unas semanas de clase y es posible que muchos de vosotros os hayáis topado con una realidad un tanto diferente a la que teníais en cursos pasados. Gestionar el estrés siendo estudiante puede llegar a ser complicado en algunas situaciones que se dan a lo largo del curso académico, pero con algunas estrategias efectivas, puedes mantener un equilibrio saludable entre tus responsabilidades académicas y tu bienestar emocional. Aquí tienes algunos consejos para ayudarte a manejar el estrés cuando te encuentres en una situación que te cueste gestionar:
Organización y Planificación
Utiliza una agenda o aplicaciones de organización para realizar un seguimiento de tus tareas, fechas de entrega y exámenes. Una vez hecho esto, divide las grandes tareas en tareas más pequeñas y manejables. Esto hace que las cosas parezcan menos abrumadoras.
Técnicas de Estudio Efectivas
Encuentra el método de estudio que funcione mejor para ti, ya sea resúmenes, mapas mentales o el uso de alguna aplicación móvil o dispositivo electrónico. Si eres de los que se agobia rápido, establece intervalos regulares de estudio con descansos cortos para mantener la concentración y evitar la fatiga mental.
Cuidado Personal
Sin duda este consejo es primordial, prioriza el sueño adecuado. El sueño insuficiente puede afectar negativamente tu capacidad para manejar el estrés, además de mantener una rutina regular de ejercicio y una dieta equilibrada. El ejercicio ayuda a liberar endorfinas, reduciendo el estrés.
Equilibrio Entre Estudio y Tiempo Libre
Dedica tiempo a actividades que disfrutes, ya sea leer, ver películas, practicar un pasatiempo, etc. Nunca dejes de hacer cosas que te entretengan o hagan que desconectes después de un duro día de clases.
Aprende a Delegar
Es muy común que en los trabajos de clase haya siempre unas personas más implicadas que otras. Reparte y comparte la carga de trabajo y responsabilidades y no caigas en la trampa de hacerlo tu todo. En caso de que salga mal, no te castigues por los errores, en su lugar, aprende de ellos y utiliza esas experiencias para crecer.
No Descuides Tu Vida Social
Tu vida social es muy importante en situaciones de estrés elevado pues te permiten evadir por un rato de tus problemas. Las compañías más cercanas son vitales para la gestión de situaciones complicadas de estrés.
Recuerda que el estrés forma parte de nuestras vidas, la clave es intentar aprender a controlarlo o minimizar sus efectos adversos y sobrellevarlo de la mejor manera para que no afecte a nuestra salud emocional. ¡No dudes en buscar ayuda si la necesitas y cuídate mucho!