En relación al blog que subimos hace unas semanas sobre la garantía y devolución de nuestros aparatos tecnológicos, hoy lo dedicamos a hablar sobre esos aparatos u objetos que ya están inservibles y que tenemos ocupando espacio en casa por no saber qué hacer con ellos. Nos referimos a los móviles antiguos, ordenadores viejos, cables, auriculares enrollados a cargadores que ni sabemos a qué móvil pertenecen, etc. Muchos de ellos tienen como elemento principal el plástico, no obstante, es un error pensar que el adecuado tratamiento de estos objetos es el tirarlos al cubo del plástico y mucho menos el orgánico.
La obsolescencia programada es una de las razones por las que cada vez acumulamos más cantidad de estos productos. El hecho de que su vida útil sea tan corta, bien porque nos compramos un aparato mejor o simplemente porque deja de funcionar, hace que encontremos en nuestros cajones grandes cantidades de cables inservibles o móviles con baterías a punto de estallar. Es evidente que por los motivos antes comentados la “basura tecnológica” no ha hecho más que aumentar de forma exponencial en las últimas décadas y parece que este crecimiento se incrementará a corto plazo, por todo ello se hace indispensable ser conscientes de los problemas ambientales que se pueden derivar de esta situación.
La mayoría de estos objetos contienen componentes altamente contaminantes como metales pesados tales como el cadmio, el bromo, el mercurio, el cromo o el plomo que resultan especialmente nocivos para el agua y para el aire, agua que bebemos y aire que respiramos lo cual repercutirá en numerosos problemas de salud. Sin duda si estos componentes acaban en nuestro entorno pueden causar numerosos problemas de salud en la población. Según un informe de la ONU apenas se recicla un 20% de estos residuos tecnológicos lo que pone de manifiesto el grave problema al que nos enfrentamos.
El tratamiento óptimo para el reciclaje de productos y objetos de este tipo es llevarlo a un punto limpio que se encargue de hacerlo. Para cualquiera de los productos y objetos enumerados anteriormente el punto limpio será el lugar adecuado. Pese a los esfuerzos de los fabricantes de estos productos por aumentar nuestro consumo empleando estrategias tales como la obsolescencia programada comentada anteriormente debemos ser conscientes de la cantidad de “basura” que generamos la cuál difícilmente podremos eliminar en un corto período de tiempo.
Si no sabéis donde encontrar un punto limpio o de reciclaje adecuado para estos productos y objetos tecnológicos de los que hablamos, os dejamos este enlace de la web de la «Fundación Ecolec» donde podéis ver en el mapa los puntos más cercanos a vosotros:
https://ecolec.es/reciclar-aparatos-electronicos/
O en la web de la OCU filtrando por vuestra ciudad:
https://www.ocu.org/consumo-familia/derechos-consumidor/calculadora/puntos-limpios